Reformas

Se trata de una de las partes más confortables de nuestros hogares: el agua caliente. Es de esas cosas que pasan desapercibidas hasta el momento en el que se apaga el calentador. Así, gracias a los termos podemos disfrutar de baños relajantes que nos ayuden a desconectar de todo el día. También nos ayudan a ponernos las pilas si dos damos una ducha por la mañana que nos despierte. En cualquier caso, es de vital importancia mantener al día esta pieza de nuestros hogares. Las revisiones periódicas nos pueden evitar muchos problemas.

Además de ser consciente de esto, también es bueno estar informado y ver que opciones son las más habituales del mercado. Por ello, hoy os traemos las ventajas y los inconvenientes de instalar un calentador de gas, eléctrico o solar.

Calentadores: ventajas e inconvenientes

Los más habituales suelen ser los de gas. A su vez, estos pueden emplear: butano, propano o gas natural. Estos calentadores contienen varias ventajas. Son más baratos que los eléctricos. Además, el agua sale caliente mientras quede gas. De otra parte, requieren de muchas revisiones. Además, el agua tarda más en calentarse que el de tipo eléctrico. Finalmente, si es butano y no gas natural, hay que estar pendiente de cambiar la bombona.

Los eléctricos no necesitan instalación de gas, es uno de sus principales beneficios. Junto a esto, la temperatura es constante y el agua sale caliente directamente. Sin esperas. En contraposición, ocupan mucho espacio, el agua caliente es limitada y, además, la electricidad es más cara que el butano.

Finalmente, aquellas que son mediante instalación de placas solares son las que menos daño hacen al medioambiente. Sin embargo, contienen una serie de inconvenientes. En este sentido, tienen un precio muy elevado, y una instalación que requiere mucho espacio disponible.

Estas son las tres opciones más habituales en el mercado. Recuerda, en Quale Construcciones te estaremos asesorando desde el principio. Llámanos al 951082526 o envíanos un email a [email protected].